Día I


Me deleito en las palabras de la dama de luz negra
Péndulo en ellas como un columpio celestial
Entre las blancas nubes de mi inocencia, suelo buscar su compañía
Siendo solo lo que una vez fui, dejando la armadura que una vez soldé.

Despierto en los segundos que conozco mi llanto
Encuentro las sonrisas de un hermoso pasado
Así veo que el dejar ir y el retener son solo condiciones del alma
vivir con placer, recordar con dolor , olvidar con alivio.


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